La limpieza industrial es un proceso necesario para lograr dejar como nueva grandes cantidades de piezas para un posterior montaje o para el buen tratamiento de la superficie. Ejemplo es el pintado, el galvanizado o un tratamiento térmico. Además, también es esencial el mantenimiento tanto de herramientas y componentes.
Sabiendo esto, la limpieza preventiva y el mantenimiento de una línea de producción hacen que los productos salientes sean de mejor calidad y evita pérdidas en cuanto a tiempo y gastos innecesarios por interrupciones.
Los equipos para la limpieza por agua a presión, ultrasonido o inmersión son medios indispensables en todo proceso de producción para lograr la mejor calidad en el acabado de un producto. Ayudan a eliminar restos y residuos de elementos como virutas de metal, óxido, aceite, polvo, resinas, entre otros.